Este post realmente no tiene una razón especial, ni lo hago por algún hecho ocurrido hace poco. Simplemente me estaba acordando de mis primeros coches. Desde que tengo carnet de conducir, hace casi 5 años, he tenido en propiedad 3 coches (aparte de conducir unos cuantos, pero no tiene mucho que ver con el post), de los cuales 2 han sido Ford Fiesta.

El primero, un Fiesta Si del 95 con un 1.6 16v con inyección electrónica y 90cv no estaba mal la verdad. De electrónica tenía la ECU para el motor y pocas cosas más, pero ni ABS siquiera. El segundo, un Fiesta RS1800 (mal llamado en España XR2i, cuando el XR2i era un 1.6 8v con carburador) del 92, que tenía un motor 1.8 16v. El mismo motor que el anterior Fiesta pero con más cilindrada y 130cv.Este por no tener, no tenía ni dirección asistida. Se puede decir que al comprarlo «involucioné» en cuanto a mejoras pero gané en cuanto a prestaciones. ¿Qué ventajas tenía? Un motor mucho más vivo, con un bonito sonido por encima de las 3000 vueltas y con un empuje excelente.

Pero como en todos los Fiesta, el chasis era una basura, tan blando que si lo subías en borriquetas cerraba mal la puerta. Por suerte el RS1800 venía con suspensión bilstein y muelles más cortos y duros, así como barras de torretas delante y detrás. Tenía buena respuesta con el chasis algo más duro, y con unas Toyo T1-R que me encantaron desgastar. Para colmo, entre topes del volante tenía 4 vueltas y media (cuando en el anterior fiesta eran 3 y pico), lo que hacía que pareciera que conducía un autobús en las rotondas. Y ya por acabar de meternos con el pequeñín, de frenos andaba un poco justo para lo que corría el coche. Siquiera se molestaron en mejorar los frenos para la versión deportiva del Fiesta. Aun así, guardo un grato recuerdo de ese coche, y hoy en día echo de menos la respuesta de ese motor y su sonido.

Ahora poseo un Alfa Mito, el 1.4 Tjet de 155cv (sin multiair desgraciadamente). Las mejoras con respecto a un coche de hace 17 años (con respecto al RS1800) y otro de hace 14 (con el Si) son evidentes. Para empezar en el Mito hay chorrocientos sistemas (hill holder, ESP, ABS, distribución electrónica de frenada, etc.) que hacen al coche bastante estable y que pueda llevarse sobre raíles prácticamente. Otra diferencia palpable es el ruido que entra en el habitáculo, mucho menor.

Pero a mi entender hay cosas que no siempre son buenas, aunque de forma objetiva si lo sean. Por ejemplo, con los coches antiguos he tenido mil y una historias. Romperse el cable del embrague y tener que cambiar sincronizando manualmente las marchas hasta llegar al taller, romperse un sensor de presión de aceite y tener que ñapear el agujero para poder llegar a Madrid, romperse el catalizador, bloquearse una pinza de freno delantera, romperse el radiador, etc.

Todo eso me ha servido para poco a poco aprender algo de mecánica (poco la verdad en comparación con algunos compañeros del club del Ford Fiesta), pero me ha servido principalmente para perderle el miedo a buscar soluciones en el acto y meterle mano al coche. En los coches actuales esto no es posible. O bien porque está todo tapado, o porque no tienes material informático, o porque se te rompe un sensor y solo se puede arreglar cambiandolo. Pueden ser mil cosas.

Aparte, cada vez hace falta gente mejor cualificada para arreglar el coche, y muchas veces llevar un coche nuevo con tanta electrónica a un taller de barrio puede ser contraproducente, con el consiguiente gasto extra de pagar el taller oficial.

¿Compensan estas (y otras razones que no expongo para no hacer aquí un post interminable) razones para querer más los coches nuevos que los antiguos? Yo creo que sí, pero también creo que los sentimientos que transmiten los coches «viejunos» no se puede obtener actualmente, por mucho que haya avanzado el sector y la tecnología. Espero que haya gente que cuide de coches clásicos y especiales, para en un futuro poder volver a disfrutar de una máquina en la que el piloto es quien tiene el control absoluto, y en donde las manos es lo más importante.